Impulsada por el Ministerio de Desregulación y Transformación, a cargo de Federico Sturzenegger.

El proyecto se enviará al Congreso en los próximos días para su debate, y se espera que las leyes derogadas incluyan aquellas que ya no cumplen una función en el contexto actual. En palabras de Sturzenegger, durante un evento de la Organización Internacional de Comisiones de Valores (IOSCO), “no hay que tenerle miedo al exceso de desregulación, siempre se puede corregir”.

El ministro destacó que el propósito de la ley es liberar a los sectores productivos y comerciales del peso de normativas que han quedado desfasadas.

La “Ley Hojarasca” forma parte de un paquete más amplio de medidas que el gobierno de Milei ha implementado para fomentar la liberalización económica en el país.

El Ejecutivo señaló cuáles son las seis claves que se tienen en consideración para derogar determinadas leyes que se condieran “inútiles y obsoletas”:

Leyes que fueron sustituidas y englobadas por otras más completas y modernas.

Leyes que fueron superadas por la tecnología, el avance del conocimiento, de la economía o el paso del tiempo. Una de ellas es la ley que autoriza las emisiones de televisión a color cuando hoy vemos imágenes de video en nuestras redes sociales.

Leyes que limitan la libertad individual. Por ejemplo, la ley que autoriza al Estado a supervisar y prohibir reuniones en lugares privados resulta una aberración frente a la Constitución Nacional. Aún continúa vigente una ley sancionada en 1951.

Leyes cuya derogación implica avanzar con el programa de desburocratización, eliminando organismos y normas sobre regulatorias, alivianando el presupuesto público, sin perder la eficiencia.

Leyes que ya no tienen razón de ser, porque los organismos o instituciones responsables dejaron de existir en los hechos, pero las leyes que los crearon siguen vigentes.

Leyes que crean organismos para integrantes del Sector Público, solventados con recursos del Estado Nacional. Estos incluyen al Círculo de Legisladores y la Federación Argentina de Municipios. Se emancipa a estos entes con la eliminación del financiamiento por parte del Estado Nacional, sin perjuicio de que sigan funcionando, con recursos propios.