El proyecto para que las elecciones sean concurrentes que presentaron legisladores que responden a Cristina desaron la furia en el gobierno bonaerense. 

La presentación de un proyecto en el Senado bonaerense para que las elecciones sean concurrentes, rompió en mil pedazos la negociación de unidad que se estaba llevando adelante entre los tres socios mayoritarios de Unión por la Patria (UP).

El martes la noche, doce horas antes de que se conociera el proyecto ley, representantes del massismo, el camporismo y el kicillofismo habían avanzado sobre el acuerdo de suspender las PASO. Existía un clima tenso pero señales de consenso a la distancia.

El envío del proyecto al Senado detonó un conflicto nuevo que dejó al peronismo bonaerense en un limbo. La ruptura comenzó a ser una hipótesis con más argumentos que antes.

Cuando se defina el día en que se hará la elección, es decir, si es desdoblada o concurrente, indefectiblemente una de las partes habrá ganado la primera gran pulseada de lo que un dirigente describe como una “sucesión traumática”.

Tras la movida cristinista, a través, de la senadora Teresa García, con el proyecto de elecciones concurrentes, Kicillof dio un paso más con dos movimientos. Primero puso un deadline: si el 3 de abril la Legislatura no voltea las PASO, anunciará la fecha. Después, este viernes, hizo saltar a la cancha a la tropa territorial que lo banca: 45 jefes comunales pusieron la firma en un documento en el que piden desdoblamiento. Antes, habían pedido lo mismo intendentes radicales.

Un intendente alineado con CFK que asegura no estar al tanto “de la rosca chiquita” manifiesta su fastidio con la situación. “Nadie va a salir ganando si se rompe. Lastimados o cagados a palos, tenemos que llegar juntos”, dice y afirma que sería Kicillof quien más perdería con una ruptura total.

“Te imaginás, vamos partidos y la lista del gobernador saca 20 puntos. ¿Cómo sigue los años que le quedan con los libertarios encima? Con eso dinamita sus posibilidades para el 2027”, afirma para reconocer. Tampoco es negocio para CFK: “Su lista tampoco puede representar un porcentaje similar porque desaparece”, lanza.

Los intendentes juegan en lo que se interpreta como un mensaje a Cristina y Máximo Kirchner, un grupo numero de ellos publicaron un comunicado en el que manifestaron su respaldo a la decisión de Axel Kicillof de desdoblar la elección bonaerense de la nacional.

En el texto señalan que frente a la utilización de dos sistemas electorales diferentes, como la Boleta Única Papel (BUP) y la boleta sábana tradicional, el normal desarrollo de las elecciones se verá alterado. El texto ve la luz dos días después de que el cristinismo presentara un proyecto en el Senado bonaerense para que las elecciones sean concurrentes.

De los 135 municipios que tiene la provincia de Buenos Aires, recibió el acompañamiento de 74. Es decir, más de la mitad de la totalidad. Un mensaje fuerte para la interna del peronismo, en un momento de máxima tensión.

Cristina y Máximo Kirchner quieren que la elección sea concurrente, mientras que Kicillof considera que debe desdoblarse.