El papa grabó un mensaje dirigido a los ciudadanos de Rosario en medio de la escalada narco de violencia que atraviesa la ciudad.
En un video de siete minutos de duración, el pontífice recordó un versículo del Evangelio de Mateo que dice: “Felices los que trabajan por la paz”. Allí, luego de afirmar que “en un momento de crisis como los que vive Rosario” es necesaria “la presencia de las fuerzas de seguridad para llevar tranquilidad a la comunidad”, afirmó que “en el camino de la paz se deben transitar respuestas complejas, integrales y con la colaboración de todas las instituciones que conforman la vida de una sociedad”.
Hizo un llamamiento al Poder Judicial para que “pueda ser independiente para investigar los entramados de la corrupción y del lavado de dinero que facilitan el avance del narcotráfico”.
En la misma línea señaló que “el silencio del Estado” solo “naturaliza y facilita la promoción del consumo y comercialización”, y marcó como “necesario trabajar no sólo sobre la oferta, sino también sobre la demanda de drogas a través de políticas de prevención y asistencia”.
Atento al recrudecimiento de los delitos asociados al narco en las últimas semanas, el pontífice consideró que de la “crisis” que atraviesa esa ciudad se sale con “todos los sectores políticos” sintiéndose “llamados a transitar el gran camino del consenso y del diálogo”.
“Nadie se salva solo –dijo-, aun en los barrios privados, se puede encontrar la inseguridad y la amenaza del consumo para los propios hijos”. reconoció que la peor víctima es el sector hundido en la pobreza: “En todo sistema mafioso, los pobres son el material descartable”.

